El Plástico VCI (Inhibidor Volátil de Corrosión, por sus siglas en inglés) es un innovador producto diseñado para prevenir la corrosión en metales durante el almacenamiento y transporte. Este plástico especial está impregnado con compuestos químicos volátiles que emiten vapores capaces de proteger los metales de la corrosión, incluso en ambientes adversos.

La corrosión es un proceso químico que afecta a los metales, debilitando su estructura y disminuyendo su vida útil. En entornos industriales y logísticos, donde los metales están expuestos a la humedad, los cambios de temperatura y otros factores ambientales, la corrosión puede ser especialmente perjudicial. Aquí es donde entra en juego el Plástico VCI.

Al envolver o recubrir los metales con Plástico Anticorrosivo, se crea una barrera protectora que libera de manera controlada los inhibidores de corrosión. Estos compuestos crean una capa invisible en la superficie del metal, evitando que la humedad y los contaminantes entren en contacto directo con el material. Esto interrumpe el proceso corrosivo al prevenir la formación de óxido y otros productos de degradación.

El Plástico VCI es altamente versátil y puede adaptarse a una variedad de aplicaciones y formas de metales, incluyendo piezas mecanizadas, componentes electrónicos, maquinaria y herramientas. Es ideal para la protección a largo plazo, ya que los compuestos inhibidores se mantienen activos durante meses o incluso años, dependiendo de las condiciones.

Además de su efectividad en la prevención de la corrosión, el Plástico Anticorrosivo ofrece ventajas económicas y ambientales. Al extender la vida útil de los metales y reducir la necesidad de reemplazo, se disminuyen los costos de mantenimiento y producción. Además, al prevenir la corrosión, se contribuye a la reducción de residuos y al uso más eficiente de los recursos.